RECETA PARA SER UN BUEN MAESTRO
Últimamente
todo el profesorado aboga por el trabajo cooperativo, la inteligencia
emocional, las estrategias del pensamiento… pero, ¿Sabemos aplicar estas nuevas metodologías a nuestra tarea
diaria? ¿Cómo pueden realizar un nuestros alumnos y alumnas un buen trabajo en
equipo si el conductor del proceso no está preparado?
El
claustro de profesores del C.E.I.P. Puerta de Alcalá se ha puesto en la piel de
su alumnado y ha realizado una serie de recetas para ser un buen maestro
gracias al trabajo en equipo.
La
figura del docente se asemeja a los grandes Chefs ya que ambos para ser buenos
en lo suyo, haciendo maravillas con pocos ingredientes. Por ello íbamos a
convertirnos en grandes CHEFS dentro del juego “Master Emotion”
La
encargada de la formación, nuestra compañera Carmen, realizó un panel donde se
encontraban todos los “ingredientes” para ser un buen docente y en una de las
esquinas del panel, los utensilios con los que se cuenta.
Para
ello, nos dividimos en grupos de cuatro, donde cada individuo tenía su rol:
coordinador, portavoz, mediador y encargado del material. ¿Estamos preparados
para que un igual decida por el grupo? ¿Qué compañero expresará mejor lo que el
equipo quiere decir? ¿Qué debe tener un buen mediador para una posible
resolución de conflictos? Estos son aspectos, que parecen fáciles en un
principio, pueden llevarnos bastante tiempo hasta que llegamos a un consenso.
Organizado
ya el equipo, cada grupo eligió un nombre, un símbolo, un color y un eslogan para su equipo. Además de dar una
identidad al grupo, la elección de estos va a determinar su idiosincrasia.
El coordinador de cada equipo debía elegir los diez ingredientes fundamentales para ser
un buen docente, además de los recursos que considerara conveniente. La
velocidad, para que los demás coordinadores no cogieran los ingredientes
elegidos como la agudeza mental, para elegir los ingredientes considerados más
importantes, fueron fundamentales para la realización de la actividad.
Teniendo ya los ingredientes,
cada equipo se dispone a elaborar la receta de un buen docente. La actividad
consistía en expresarla por escrito a gusto del equipo: de esta manera,
salieron cuentos, poesías, descripciones y como siempre hay un equipo más “listillo”,
también hubo una receta cuya composición sí que correspondía con la que
conocemos.
A continuación, os mostramos algunos de los resultados.
RECETA GRUPO 1:
PARA SER UN BUEN
DOCENTE:
-
Se
necesita corazón, formación, expresando actitudes positivas hacia tus
alumnos/as.
-
El sistema
educativo con su normativa ayuda a crear un buen clima de trabajo entre el
equipo directivo y los compañeros utilizando los recursos y espacios del aula.
-
Las
materias son emociones y sentimientos que nos conducen a la felicidad
-
El tiempo
en familia y la formación son las bases necesarias para amar y tolerar.
RECETA GRUPO 2:
Si queréis ser un buen
docente,
ten paciencia con tu
gente.
La normativa no la
puedes olvidar
ya que en sistema
educativo tienes que estar.
Ten en cuenta tu
creatividad
y tampoco olvides memorizar.
Dale rienda suelta a
tu imaginación
para ayudar a la
comprensión.
Si tu profesión quieres
amar,
trabaja tus
sentimientos y ¡lo lograrás!
RECETA GRUPO 3:
El sistema educativo
Nos da recursos a
todos
Nos da espacios y
tiempos
Y compañeros valerosos.
La tolerancia, un
valor
La paciencia para
todos
La cooperación
necesaria
Y el respeto, un gran
logro.
Educar para la vida
Ayuda a la diversidad,
La planificación
importante
Y un montón de
creatividad
Y ya para terminar
Usar la imaginación
Actitudes positivas
Y voluntad, mogollón.
RECETA GRUPO 4:
Estábamos todos los compañeros en una
formación sobre competencias y emociones. Tuvimos que hacer una planificación y
echarle mucha imaginación. Suponemos que con práctica, paciencia y tiempo
conseguiremos las habilidades y destrezas. Pusimos tensón para que el currículo que dicta la normativa no nos impida nuestra creatividad al impartir las
diferentes materias.
Lo importante son nuestros alumnos, de los
que vamos a respetar su ritmo de aprendizaje en constante colaboración con la
familia aunando criterios.
Os animamos a poneros en la piel de nuestro
alumnado. Es la única forma de comprender lo que sienten, piensan y expresan.
Estábamos todos los compañeros en una formación sobre competencias y emociones. Tuvimos que hacer una planificación y echarle mucha imaginación. Suponemos que con práctica, paciencia y tiempo conseguiremos las habilidades y destrezas. Pusimos tensón para que el currículo que dicta la normativa no nos impida nuestra creatividad al impartir las diferentes materias Encuentra más información
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